Ante los numerosos anuncios de colutorios que se emiten en los medios de comunicación, el Consejo General de Dentistas de España, advierte -una vez más- de que el uso de este tipo de productos debe reservarse para aquellos casos clínicos en los que un dentista profesional lo considere oportuno.
La reducción del riego de tener caries en nuestra boca o la eliminación de placa bacteriana son algunos de los beneficios para la salud bucodental que conlleva el uso de colutorios. No obstante, estos efectos positivos no son motivo para que se utilicen sin la prescripción de un dentista ya que algunos de estos pueden suponer consecuencias negativas como, por ejemplo, aparición de manchas amarillas den los dientes dependiendo del esmalte de cada persona, alteraciones en el gusto y, sobre todo, lo más importante, la posibilidad de ocultar alguna lesión que pueda ser grave.
Por este motivo, desde Clínica Carolina López insistimos en que los colutorios bucales deben de usarse siempre como un complemento, parte de un plan de prevención o un plan terapéutico, pero nunca debe de ser sustituido por el cepillado dental. A pesar de que será nuestro dentista quien nos diga cómo hacerlo, es importante saber que nuestro cepillado sea exquisito: dos veces al día como mínimo, con pasta dentífrica fluorada –te contamos en este post en qué consiste– y acompañado del uso de hilo dental o cepillos interdentales.
El Consejo General de Dentistas de España insiste en que para evitar que la ciudadanía utilice cualquier producto sanitario sin indicación de un facultativo, es necesario que se apruebe una ley de publicidad sanitaria para que todos los mensajes publicitarios que lleguen a la población estén basados en la evidencia científica. Además, deberán incluir las advertencias y precauciones que sean necesarias para informar al paciente de los posibles efectos adversos o riesgos derivados de la actividad o producto sanitario anunciado.
