Que tus hijos tengan todavía dientes de leche no es óbice para que cuiden correctamente su boca y adquieran los hábitos de una correcta higiene bucodental. Pero si esto es fundamental, no es menos importante que acudan a revisiones periódicas con su odontólogo. Solo así se pueden prevenir futuros problemas o detectar y corregir a tiempo aquellos que el pequeño pudiera padecer ya. Hoy te contamos cuáles son los tratamientos más comunes para solucionar las afecciones más habituales durante la infancia y adolescencia.
Tratamientos preventivos
- Limpieza bucal. Al poder acceder allí donde los cepillos de dientes no llegan, la limpieza profesional es muy útil para reducir las posibilidades de padecer caries, al tiempo que los pequeños comienzan a familiarizarse con las visitas al dentista.
- Aplicación del flúor. Gracias a este tratamiento preventivo se endurece el esmalte de las piezas dentales, haciendo posible que los niños tengan uno dientes fuertes y sanos.
- Sellado de fosas y fisuras. Se trata de un procedimiento sencillo, poco invasivo e indoloro, en el que se sellan las partes más susceptibles a la caries por el difícil acceso al cepillado. Se limpian profundamente las grietas de los molares, se acondiciona la superficie del diente para que quede receptivo al material y finalmente, se aplica en la zona más profunda de las fisuras normales. Es especialmente aconsejable en las etapas de la niñez, en que es difícil conseguir una buena higiene buco-dental. Este proceso se realiza tantas veces como sea necesario.
Tratamientos restaurativos
Son aquellos en que se devuelve la forma y función de un diente que ha sido afectado por una caries, un golpe o una malformación. En este caso, sí se debe aplicar anestesia para eliminar la sensibilidad dental y poder tallar el diente y eliminar la parte dañada. Según la extensión de la lesión podemos optar por los siguientes tratamientos:
- Restauración de composite. Es una excelente opción para restaurar una pieza dental, ya que devuelve al diente el color, la forma y la función que tenía antes de la caries o lesión.
- Coronas metálicas de acero cromo. Es la opción cuando la destrucción del diente es tal que no soportaría una resina. Devuelve la forma y la función, pero no es tan estético por su color plateado.
- Coronas de Zirconio. Es la alternativa más estética a las coronas metálicas. También son las más indicadas, cuando no se pueda colocar una obturación de composite. Sus inconvenientes son que el tallado es más agresivo y el coste es mucho más elevado que en el caso de las coronas de acero.
- Coronas de acetato. Es la mejor y más estética opción, cuando los dientes anteriores están muy destruidos. Para recuperar la forma y función las coronas se hacen de resina.
Tratamientos correctores (ortodoncia infantil)
Corrige patologías de colocación dental, problemas óseos de crecimiento, como la mordida cruzado o el paladar estrecho y también diferentes tipos de maloclusiones, que se tratan mejor en niños y adolescentes, por estar en etapa de crecimiento. Los tipos de ortodoncia infantil son muy similares a los de los adultos:
- Fija. Es la más común entre los pequeños, los conocidos como brackets metálicos. Se fijan a los dientes mediante arcos, para conseguir que las piezas corrijan su posición. Su principal inconveniente es que son poco estéticos y dificultan una correcta higiene bucal.
- Lingual. Es un método muy similar al anterior, pero, al colocar los brackets en la parte interior de los dientes, son mucho más estéticos.
- Removible. Se utiliza cuando el niño no necesita un tratamiento tan intenso. Es similar a los brackets, pero no está adherido a los dientes y, por tanto, se puede poner y quitar, facilitando así la higiene bucodental.
- Invisible. Se basa en alineadores o férulas trasparentes, que se pueden quitar y poner. Su principal pega es que si el paciente no es constante y no los lleva puestos alrededor de 20 horas diarias será difícil conseguir los resultados esperados.
Tratamientos pulpares infantiles
Cuando la lesión de la caries es muy extensa, afecta el nervio del diente y es necesario realizar un tratamiento pulpar antes de la restauración.
- Pulpotomía. Remueve la parte superior del nervio del diente dañado y deja la parte que está dentro de las raíces intacta.
- Pulpectomía. Es necesaria cuando la carie ha avanzado tanto que ha infectado todo el nervio del diente, causando dolor, absceso o colección de pus. Se elimina totalmente el nervio dental y se coloca un medicamento de relleno en el espació que éste dejó.
Tratamientos post pérdida de un diente temporal
Cuando no es posible conservar la dentición temporal, hasta que se exfolie naturalmente, se debe llevar a cabo la extracción de estas piezas dañadas. Para evitar que los dientes de los lados se muevan y bloqueen la salida de los dientes permanentes, hay que colocar un mantenedor de espacio. Este puede ser uni o bilateral y mantener el espacio de un solo diente (mantenedor banda asa, propioceptivo o corona asa) o de varios (arco lingual, o botón de nance, entre otros).
