Dolor. Este es el síntoma que muchos padecemos cuando las muelas del juicio irrumpen en nuestras vidas para quedarse. Son las muelas que más problemas producen cuando salen, pero no te preocupes, en Clínica Carolina López te damos los mejores consejos para que, ante esta situación, no sufras más de la cuenta.
Ahora bien, ¿cuáles son las causas del dolor? Generalmente, cuando hablamos de las muelas inferiores, este surge a raíz de una infección o inflamación de la encía que recubre la muela, lo que se denomina: pericoronaritis. También podemos encontrarnos con el caso de que solo sea una inflamación, por lo que con una correcta higiene y antiinflamatorios desaparece, a diferencia de los casos de infección que serán necesarios los antibióticos. Cuando el dolor se produce en la parte superior, normalmente ocurre al abrir la boca por el roce de la mejilla. Tanto en la parte superior como inferior, otra de la causas pueden ser las caries profundas debido a la acumulación de residuos producidos por una mala posición de la muela, algo que siempre causa dolor.
Pero, realmente, lo que más nos interesa es cómo podemos aliviar el dolor. Aquí te dejamos algunos consejos. No obstante, cada paciente presenta una características particulares por lo que, ante un dolor de cordales o muelas del juicio, es importante acudir a profesionales capaces de hacer una valoración de la decisión a tomar. Antes de tu visita, ¡esto te ayudará!
– Limpia tu boca intensamente. Mantener un higiene bucal excelente es clave para evitar, después de cada comida, la acumulación de residuos. Hay que tener especial cuidado en la zona del dolor. En ella, debemos pasar el cepillo dental sin apretar, con mucho cuidado y sobre todo, utilizar el hilo dental y el enjuague.
– Masca chicle cuando notes dolor. Esta sensación aliviará momentáneamente el dolor que generalmente se produce cuando la muela está empujando para salir. Muy importante, sin azúcar. Y sin olvidar que es un remedio que funciona de forma momentánea.
– Enjuágate con agua caliente salada. Esta opción es de las más naturales y caseras. Con agua salada caliente -durante 30 segundo y después de lavarte los dientes- conseguirás aliviar el dolor de forma moderada.
– Pon frío o calor en tu mejilla. Aplicar frío o calor en la mejilla –no en la muela- calmará tu dolor en un momento dado. Este método no debe aplicarse más de 20 minutos ya que puede causar lesiones en la piel.
Como puedes observar, estos remedios son caseros y pueden ayudarte a aliviar el dolor producido por las muelas del juicio. Recuerda que, ante la reiteración del dolor, es importante acudir al dentista. En muchas ocasiones, dependiendo de las características de cada paciente, el mejor consejo es la extracción de la muela. Será en aquellos casos en los que la muela esté saliendo mal, no haya espacio suficiente en la boca o el dolor sea persistente.